El Comité de Estabilidad Financiera analizó la situación del sistema financiero y evaluó los potenciales riesgos que podrían afectarle. Se concluyó que el sistema financiero doméstico se encuentra estable y en condiciones de procesar adecuadamente los riesgos identificados. A continuación se presenta un resumen de los principales elementos considerados durante la reunión.
La reciente quiebra de dos bancos regionales en EEUU y la consecuente pérdida de confianza en el mercado bancario europeo ha desencadenado una serie de medidas por parte de las autoridades para evitar el riesgo de contagio, incluyendo la compra de Credit Suisse por parte de UBS. A pesar de que estas medidas parecen haber sido efectivas en el corto plazo, el sistema financiero internacional sigue presentando vulnerabilidades y riesgos. Mientras tanto, la inflación internacional ha comenzado a disminuir, aunque el componente subyacente todavía muestra cierta persistencia. Aunque los mercados redujeron sus expectativas sobre la senda de tasas de interés después de la quiebra de los bancos, todavía existen factores que pueden mantenerlas en niveles elevados por más tiempo, lo que podría desencadenar nuevos episodios de estrés en los mercados financieros. En este contexto, persiste el riesgo de que se produzca un mayor deterioro en las condiciones financieras internacionales, con mayor aversión al riesgo por parte de los inversores, condiciones de acceso al financiamiento menos favorables, mayor volatilidad y reducción del producto a nivel mundial.
La invasión de Rusia a Ucrania continúa afectando la economía mundial, fundamentalmente a través de Europa y agregando incertidumbre. Adicionalmente, en los últimos años se ha reforzado la tendencia hacia un mundo más fragmentado, con un fuerte incremento en las restricciones al comercio y un aumento en las tensiones. El alto grado de incertidumbre respecto a la duración y la profundidad del conflicto, así como el aumento en la fragmentación mundial, determina que el riesgo geopolítico sea objeto de monitoreo y evaluación permanente por parte del Comité.
Las perspectivas de crecimiento de la economía China han mejorado, reflejando la reapertura de la economía y los anuncios de políticas de apoyo al sector inmobiliario realizados en octubre del año pasado. Sin embargo, el sector inmobiliario aún no se ha recuperado y los indicadores de alta frecuencia del mismo muestran resultados mixtos. En virtud de ello, se continúa monitoreando el desempeño de la economía China.
A nivel regional, persisten los riesgos en los procesos de ajustes de los desequilibrios macroeconómicos. En Argentina, la inflación sigue siendo elevada y las reservas internacionales se mantienen en niveles reducidos a pesar de las políticas implementadas. En Brasil, se mantienen los desafíos de consolidación de la sostenibilidad fiscal.
Habiendo analizado y evaluado los factores de riesgo, sus canales de transmisión y los resultados de las pruebas de tensión realizadas, el Comité concluye que el sistema financiero doméstico se encuentra estable y sería capaz de procesar los efectos de una eventual materialización de los mismos. Las propias capacidades del sistema financiero, dentro de las que se destacan sus niveles de solvencia y liquidez, determinan que esté en condiciones de contribuir al manejo adecuado de los riesgos, facilitando de esta manera el desempeño presente y futuro de la economía.
El Comité ratifica su decisión de realizar un seguimiento permanente de la situación, así como de continuar coordinando las acciones que se entiendan necesarias, en el lapso que medie hasta su próxima reunión ordinaria.