El Banco Central del Uruguay (BCU) realizó hoy una jornada de capacitación sobre buenas prácticas para la elaboración de Reportes de Operaciones Sospechosas dirigida a escribanos, quienes forman parte de los sujetos obligados a presentar este tipo de información.
La apertura de la instancia estuvo a cargo del presidente del BCU, Mario Bergara, quien recordó que las exigencias derivan, por un lado, del acuerdo de transparencia global de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) que ha impulsado el intercambio de información tributaria y, por otro, de la evaluación que en 2019 realizará sobre el país el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI).
En ese sentido, Bergara aseguró que Uruguay transita en esa línea ya que adhiere al intercambio multilateral información y, en contraposición, sostuvo que los países que no se han sumado son notoriamente los paraísos fiscales.
Asimismo, al mencionar las exigencias normativas que implica la evaluación del GAFI citó la importancia de considerar al delito fiscal como precedente de lavado de activos y el conocimiento de los beneficiarios finales de las sociedades.
El presidente del BCU destacó que acompasar las exigencias internacionales en la prevención del lavado de activos tiene una trascendencia comparable con la importancia que posee el grado de inversor en el terreno financiero.
“Una buena evaluación del GAFI en 2019 y la plena operación de Uruguay en el convenio multilateral de intercambio automático de información en el terreno fiscal son sellos análogos al grado inversor”, añadió.
En ese sentido, Bergara fue enfático al argumentar la razón: “Además del sello del grado inversor, crecientemente se mira el sello del país en prevención del lavado de activos”, dijo. Al mismo tiempo añadió que “esto implica cambios normativos, operacionales y culturales que impactan sobre las actividades y que para los profesionales implican obligaciones al momento de reportar operaciones sospechosas”.
A juicio del presidente del BCU ya no solo se mide la eficiencia del proceso, sino que se empiezan a contemplar los resultados.
Por esa razón, contemplamos el reclamo que ustedes tenían en capacitarse y, al mismo tiempo, la necesidad del sistema de prevención de lavado de que los profesionales tengan más conocimiento de los procesos para realizar estas obligaciones”, concluyó el presidente del Banco Central.
La jornada de capacitación con el grupo de un centenar de escribanos estuvo a cargo del secretario nacional para la Lucha contra el Lavado de Activos y el Financiamiento del Terrorismo, Carlos Díaz Fraga y del gerente de la Unidad de Información y Análisis Financiero del BCU, Néstor López.
La concreción de esta instancia forma parte de un compromiso asumido por el BCU en dar herramientas a estos profesionales, quienes habían manifestado la necesidad de capacitarse en la presentación de Reportes de Operaciones Sospechosas.