El rol de la regulación ha contribuido a que Uruguay haya avanzado hacia un sistema más eficiente, moderno y transparente con señales positivas hacia una mayor inclusión financiera, sostuvo el asesor del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), Martín Vallcorba.
Una consecuencia de esto es la verificación de un cambio en los hábitos de pago de los uruguayos, ejemplificó durante su presentación en las IV Jornadas de Derecho Bancocentralista. La exposición se enfocó en dos aspectos fundamentales de la Ley como la universalización de derechos y la transformación y modernización del sistema de pagos.
Los resultados semestrales del MEF muestran el cambio cultural de los uruguayos con un incremento notorio en la cantidad de pagos con tarjeta de débito en lugar de dinero en efectivo. Del mismo modo, existe preferencia por el uso de la tarjeta de débito en lugar del crédito (ver presentación adjunta).
En ese sentido, indicó que para avanzar hacia una mayor inclusión financiera, resulta fundamental contar con un entorno regulatorio propicio, educación financiera y garantías para los usuarios.
Vallcorba ejemplificó que la educación financiera es clave debido a que permite la incorporación de segmentos de la población que estaban fuera del sistema. Esa es la razón por la cual los temas de educación y protección de derechos de los usuarios contribuyen a que la experiencia sea sustentable.
“La inclusión de estos temas como cometido del BCU a partir de la reforma de la Carta Orgánica ha sido muy importante focalizada en la etapa de enseñanza a niños, jóvenes y adolescentes; tenemos que seguir profundizándola”, aseguró.
Desde la perspectiva de la regulación, destacó que la Ley de Inclusión Financiera hizo que, por ejemplo en cuanto al pago de remuneraciones, el foco del sistema financiero pasara desde las empresas hacia los usuarios.
En este aspecto, rige a partir del 1° de octubre el pago de remuneraciones, servicios, jubilaciones y pensiones a través de cuentas bancarias o instrumentos de dinero electrónico. Existe un cronograma a 9 meses donde el trabajador tiene derecho a elegir institución. Luego, en los 3 meses siguientes (julio y setiembre de 2016), en caso que el trabajador no haya optado, el encargado de hacerlo será su empleador u organismo social. Esto permitirá que a partir de mayo de 2017 quede firme la obligatoriedad de pagar a través de cuenta bancaria. También la Ley otorga la posibilidad de cambiarse luego de permanencia en una institución durante un año, por lo cual las instituciones deberán enfocarse en la calidad del servicio hacia los usuarios, dijo el asesor del MEF.
Asimismo, mencionó la modernización del sistema de pagos como otra de las claves para la inclusión financiera. Allí se destaca la regulación de la interoperabilidad de la red de terminales de punto de venta (POS). “La interoperabilidad ataca las limitaciones a la expansión del uso de los medios de pago electrónicos”, subrayó.
También, Vallcorba adelantó que se vislumbran cambios positivos en el mercado de transferencias interbancarias, ya que existían fallas de mercado que hacían ineficiente el sistema de pagos, por ejemplo, debido a los costos altos en las transacciones.
“La Ley de inclusión financiera sacudió el statu quo y generó desafíos y oportunidades con acciones positivas de todos los actores involucrados”, resumió el asesor del MEF, Martín Vallcorba.