Destacados conferencistas cerraron las VII Jornadas de Derecho Bancocentralista, destacando los alcances del instrumento legal mediante el cual el BCU realizó una innumerable cantidad de transformaciones en materia de supervisión, regulación y desarrollo institucional.
En la última de las exposiciones, el presidente del BCU, Mario Bergara, brindó un repaso de lo realizado y los desafíos pendientes.
Retomó algunos de los aspectos mencionados con anterioridad en el panel que integraron quienes en su momento ocuparon el cargo de Superintendencia de Servicios Financieros, Fernando Barrán y Jorge Ottavianelli, así como el actual superintendente Juan Pedro Cantera.
Los integrantes de la mesa a su turno abordaron los logros y desafíos a diez años de una regulación y supervisión unificada.
Durante la disertación, Bergara destacó la oportunidad de transformación que hubo en el país en los últimos años y remarcó el “fortalecimiento del BCU como deber ético ante la sociedad”.
Entre los objetivos perseguidos en su momento, mencionó: reposicionar al BCU como agente relevante, recuperar credibilidad y reputación, una definición adecuada de funciones y atribuciones, reglamentar la autonomía y responsabilidades y una reorganización institucional, todo ello en un contexto social y político que así lo demandaba.
Para Bergara, la Carta Orgánica del año 2008 “procesa buena parte de ese proceso”, y a 10 años de la misma constituye “un hito que permite evaluar sus logros y objetivos”.
En el haber, se destacan la formalización de las relaciones entre el BCU y el MEF, el fortalecimiento conceptual de la supervisión y regulación financieras, y la generación de instrumentos adecuados para la resolución de instituciones con problemas de solvencia y la administración del fondo de garantía de depósitos.
Por último, el presidente del BCU dijo que “fruto de las enseñanzas” existen propuestas de actualización de los marcos legales que inciden en la actividad bancocentralista.