Declaraciones del presidente del BCU en Lavalleja

En el primer semestre la economía uruguaya creció 2,1% en línea con la proyección definida

El presidente del Banco Central del Uruguay (BCU), Mario Bergara, ratificó la proyección de crecimiento de la economía uruguaya para 2015 de entre 2,0% y 2,5%, en línea con lo señalado en las últimas horas por otros integrantes del equipo económico de gobierno.

La economía uruguaya mantiene el desacople respecto a un contexto regional que muestra signos de deterioro mayores a lo previsto, comentó Bergara este miércoles durante la Feria Interactiva de Economía y Finanzas que se realizó en Minas (Lavalleja).

“Con los datos de estos días uno puede pensar que el crecimiento esté más cerca del 2%, debido al impacto del mayor deterioro del contexto regional”, sostuvo.

De hecho, el informe de Cuentas Nacionales publicado esta semana por el BCU muestra que en los primeros seis meses de este año la economía uruguaya se expandió 2,1%.

Sobre el contexto regional Bergara expresó que, las proyecciones originales, incluso las tomadas como base para el presupuesto, mostraban una caída de la economía de Brasil de 1,5% y que el año próximo comenzara a recuperase. No obstante, las últimas estimaciones son más pesimistas ya que este año se prevé una caída cercana al 3% y en 2016 las estimaciones indican un descenso del 1,0%, dijo.

Consultado sobre el combate a la inflación, el presidente del BCU señaló debe resultar consistente con el desafío de este nuevo entorno, manteniendo la competitividad de las empresas uruguayas y los equilibrios macroeconómicos. “No es factible pensar que uno puede resolver los problemas macroeconómicos olvidándose de la inflación”, dijo Bergara.

Finalmente, el presidente del BCU indicó que el desafío es lograr que todo lo que se ha conseguido en esta etapa de crecimiento perdure y para ello es imprescindible mantener la responsabilidad en la conducción económica, en el terreno fiscal, monetario, en los ingresos y en la competitividad.

En ese sentido, explicó que se trata de un conjunto de objetivos que hay que balancear en forma permanente para que todos se cumplan.